Cuando la II Guerra Mundial estaba dando sus últimos coletazos, algunos oficiales del Tercer Reich viajaron a América del Sur para controlar su expansión en el continente americano. Un luchador de lucha libre mexicano reclutado por el gobierno de los Estados Unidos se interpuso en el camino de los nazis para acabar con ellos de una vez por todas.
Opération Luchador (Canadá, 2021, Alain Vézina) es un falso documental muy loco y divertido con algunas magufadas delirantes. Mediante imágenes de archivo, el director y guionista va hilando eventos históricos reales con ficciones ridículas que harán las delicias de los amantes del absurdo. El metraje ficcionado tiene claros tintes de serie B de los que no se esconde: experimentos humanos, agentes dobles imposibles, amores improbables y luchadores enmascarados de lucha libre. Todo tiene cabida en Opération Luchador.
El formato es acertado pero pueden acabar pesando los 85 minutos de metraje al hacerse un poco reiterativo y en algunos momentos pesado. La voz en off omnipresente durante todo el documental no da descanso y acaba pasando factura. Es una buena apuesta para una maratón entre amigos con papas fritas, cerveza y pizza.
