Sitges: resumen del último día

Como ya es habitual, me cuesta horrores escribir sobre el último día del Festival. El cansancio, el agotamiento, decenas de películas vistas, mucho sueño y (por que no decirlo) la vagancia hacen que me retrase en los últimos apuntes.
Este año, sin embargo, Sitges nos deparaba un gran sábado de cierre. Qué digo grande, grandísimo.
Empezamos el día con Drive, la película protagonizada por Ryan Goslin. Tras ver las puntuaciones y los tomates frescos que se había llevado por los USA, entramos con gran esperanza. Y menuda película. Si amigos, menuda película. Sin duda alguna la mejor película del festival (aunque no por ello la más entretenida, que para mi fue Attack The Block). A medida que la trama avanza no puedes dejar de tener sensaciones a flor de piel, flipar con cada toma y jurarte a ti mismo que sin duda esta película dará mucho que hablar, en los Oscar y en el mundo en general.
Con un marcado estilo setentero u ochentero, canciones, letreros rosas, la historia, todo, Drive cuenta a través del inconmensurable Ryan Goslin la historia de un especialista de cine que entra en el mundo de las mafias a la vez que intenta ganarse algún que otro sueldo extra.
Bordada por los actores, por el director y por todo lo que la rodea. Es icónica como pocas lo han sido en los últimos 20 años. Su imagen con la chaqueta dorada manchada de sangre es comparable a las míticas de Taxi Driver. En fin, una pasada. Poco me queda por decir. No se gana el 5 ya que me dio la sensación en un par de escenas de parar el ritmo (seguramente queriendo) y dejarme con ganas de más.
Drive: [xrr rating=4.75/5]
Seguidamente entramos en la película sorpresa (aunque ya se barajaba desde el inicio) del festival. Killer Joe, dirigida por William Friedkin y protagonizada por Matthew McConaughey (ojo también a un posible Oscar) que la clava en todo su metraje.
Burda, fria, alocada, asquerosa, enfermiza. En fin, genial. Una película que de pies a cabeza te envuelve y te divierte pese a su locura interna. Un must see sorprendente.
Killer Joe:  [xrr rating=4.25/5]
Par acabar el día, asistimos a la gala de clausura donde se entregaron los premios. Tras la divertida aportación del distribuidor de Attack The Block (que se llevó 4 galardones, entre ellos el del pronosticado una semana antes de Premi del Públic), hizo aparición via vídeo el grandísimo Kevin Smith (que por cierto nos retuiteó a sus casi 2 millones de seguidores).
Genial monólogo que podéis ver a continuación. Descojono general.

Tras ello la película clausura. La esperada precuela de The Thing.
Digo precuela porque así nos la han vendido (si, empiezo ya la crítica). Pero bien podría ser un remake.
Muchas ostias me llevaré, pero para mi, el esquema es calcado, los sustos muy parecidos, las coñas iguales, tan solo varían un poco los personajes. No veo la necesidad, a parte de la de recaudar un fijo considerable, de copiar a la genial versión de John Carpenter.
Me decían: «Ah! pero los monstruos están mucho mejor hechos!». Nada más faltaría que casi 30 años después aun sean peores!
Todos los sustos de sonido a todo trapo, poco miedo, aunque mucho mal rollo y una aprensión enorme al asqueroso bicho malo. La banda sonoro a mi me sigue poniendo cardíaco.
En su favor, sin embargo, debo decir que como película entretenida da mucho el pego, hace su función. Divierte, das algún bote y luego la comentas y recuerdas aquellos tiempos en que John Carpenter era un crack. Este es el cine que me gusta. Que sin muchas pretensiones ni muchos azares, cumpla y acierte con la gran mayoría de espectadores. Porque sí, el cine es un negocio y es mejor (mucho mejor) vender que ser vanagloriado (si es las dos a la vez ya pasas a ala historia).
En fin, un buen remake (digo, precuela) que hará las delicias de los fans seguro.
The Thing: [xrr rating=3.25/5]
Saludos, dar las gracias a Sitges, y hasta el año que viene de Festival.