Hoy si todo va bien veremos tres películas más. Empezamos preparados y sin desayunar (como nos han recomendado) para ver Green inferno, de Eli Roth que nos promete grandes cantidades de hemoglobina.
Green inferno: [xrr rating=»3/5″]
Ya quizás por eso mismo, por la promo que se le ha hecho, y las repetidas frases «no vengáis comidos» o «la peli más bestia de los últimos años» o por lo que te esperas de Green inferno, sales de la sala con un sabor agridulce.
La peli no está mal. Entretiene que es lo que busca. Green inferno (el nombre es el mismo que el documental que los personajes van a rodar en el ya mítico falso documental Holocausto Caníbal) cuenta la historia de unos activistas que vana la selva Peruana a intentar parar la destrucción del amazonas y sus tribus. En estas que se ven envueltos en un accidente aéreo y las tribus, digamos, que se lo «agradecen» a su manera.
¿Sangre y visceras? Si, pero nada que no hayamos visto ya. Amputaciones varias y poco más. Quizás el punto que más juego da sea el mismo que anuncian desde el inicio de la película, la ablación.
Pero vamos, que si eres amante del gore, probablemente te parezca floja, y eres aprensivo, no irás a verla, así que su difícil papel viene por intentar atraer público no acostumbrado a este género, cosa que puede conseguir si no se vende como la cosa más asquerosa de los últimos años.
Tras esta, nos metemos en otra jungle, esta vez la de Indonesia.
The jungle: [xrr rating=»1/5″]
En serio. Una película que empieza con la leyenda «…y este es el metraje que se encontró» ya debería ser vetada en todos los festivales del mundo.
Pero vamos, no era ninguna sorpresa. Dirigida por el mismo director que The reef o Open Water, la película ha conseguido el abucheo generalizado del público al terminar el metraje. Hora y cuarto de ver árboles y jungla en lo que se vende como un burdo intento de imitar la fórmula (antaño de éxito, ahora trillada) del found-footage que hizo famosa a
The blair witch project.
Digamos que es como si cogieran el rodaje aburrido de Frank de la jungla y te lo pusieran sin cortes durante hora y media. En fin, un despropósito inutil y que a la postre, tenía el sonido increíblemente alto, hasta el punto de que varios espectadores se tapaban los oídos.
Por la tarde entramos a ver Space Pirate: Captain Harlock 3d.
Space Pirate: Captain Harlock 3d: [xrr rating=»3.5/5″]
Pues oye: Muy bien. Es lo que tiene Sitges, una película de la que no esperas nada, y sales de la sala pensando que amenos las casi dos horas que has estado sentado valen la pena. Debo decir que no domino para nada la historia original, así que es bien probable que nos la hayan colado y no nos hayamos enterado. Pero vamos, un estilo muy Final Fantasy, una animación bastante conseguida y un 3d interesante.
Quizás se haga un poco larga, pero no por ello deja de entretener en su estilo épico de batalla galáctica.
Y mientras tanto, en la sala Tramuntana se presentaba la serie Hemlock Grove, con Eli Roth presente, pues es el productor de la serie y director del primer episodio. Una historia de vampiros y hombre lobo que quiere romper con el Crepusculismo. Con palabras del mismo Roth, si una chica tiene la menstruación, un vampiro debería poder alimentarse haciendo un cunnilingus. Palabras que entre las risas el traductor se ha negado a traducir pues la sala tenía varios niños en las primeras filas. Muy crack Eli Roth.
Y hablando de Eli Roth, sin duda el protagonista del día, nos hemos ido rápido a la Zombie Walk, donde miles (no exagero: MILES) de zombies esperaban la salida al grito de
Lorenza Izzo, la estrella de Green inferno. Un día muy pero que muy ajetreado que hemos acabando haciendo una copa sentados al lado de Elijah Wood.
Mañana más.