Y por fin el día llegó, por fin vuelve el terror a La Peni. Ayer se inauguró la 40.ª edición del festival de cine de terror TerrorMolins en su versión presencial. Esta edición XL ofrecerá casi 200 películas entre sesiones presenciales en sus dos ubicaciones La Peni y El Foment, y online, desde Filmin. Han pasado ya dos años desde que se bajó el telón de la última edición presencial y se respira en el ambiente las ganas de volver a pisar el fabuloso templo maldito de Molins de Rei.
Para abrir boca, aprovechando que hay tiempo antes de empezar la sesión inaugural nos paseamos por la exposición retrospectiva que conmemora las 40 ediciones del festival en la sala de Ca n’Ametller. En ella, a través de imágenes, carteles y fotografías, nos transportan desde la génesis del festival en la década de los 70 hasta la actualidad. Un repaso en el que observamos cómo, después de un inicio fulgurante en su creación en el año 73 y consolidándose durante casi dos décadas, tuvo momentos complicados en los años 90. Para alegría de los amantes del género pudieron superar sus dificultades en la decada de los 2000 y desde entonces el festival no ha hecho más que crecer. Sky is the limit. Vale la pena visitar la exposición para ver los fantásticos carteles e imágenes que decoran las paredes del recinto de Ca n’Ametller.
Después de una cena ligera y deliciosa en el bar de La Peni, ya se palpa el ambiente de fiesta en la entrada al teatro. Empieza la función, Roger Sàbat, director del festival, empieza los parlamentos y nos presenta el leitmotiv de esta edición, la contracultura, génesis del festival que conocemos hoy. Además, vimos los spots de 2020 y de 2021, y el emotivo y tradicional In Memoriam.
A continuación, Miquel Pastor nos dio algunas cifras interesantes y anunció que el festival ya había batido el récord de entradas vendidas, notición para el optimismo. Larga vida al festival. Agustí Lloberes, coorganizador del festival e intérprete, junto al director finlandés Ilja Rautsi se encargaron de presentar el primer plato fuerte de la noche: Night of The Living Dicks. El director nórdico estuvo muy simpático y nos confesó que este fue el corto en el que le fue más sencillo conseguir financiación. Ya lo sabéis, si queréis financiación haced películas de penes. Palabrita de Ilja.
Night of the Living Dicks es una propuesta interesante, si bien es gamberra y tiene momentos de grandes carcajadas, trata con ingenio un tema muy en boga hoy día, la identidad de género, y reivindica la diversidad por encima de todo. Ilja Rautsi, siempre en nuestro equipo.
Después de las risas y la locura de Night of The Living Dicks nos frotamos las manos con lo que viene a continuación, ni más ni menos que la cuarta entrega de la saga V/H/S. Han pasado 7 años desde la tercera película, V/H/S Viral (EE. UU. 2014, Varios), que parecía el colofón final de la saga a la que muchos dábamos por finiquitada. Esta vez tenemos entre manos la precuela, siguiendo el mismo patrón de las anteriores con varios equipos creativos dirigiendo los episodios que se van intercalando mientras se va desarrollando la historia principal.
En esta ocasión son cinco las historias que discurren en el film. Como en todas las películas episódicas, algunas son mejores que otras. Seres de ultratumba, mad doctors, sectas, una fiesta a la altura de la ocasión. A destacar la tercera de las historias al más puro estilo shooter de videojuego.
Y después de una noche de diversión y muchas emociones damos por terminado el primer día del festival presencial. Volveremos el lunes, con dos dobles sesiones que prometen sustos, risas y algún que otro sarpullido.